RELOJES QUE NOS GUSTAN

 

Todos conocemos bien la historia de los Speedmaster Professional. Y a la vista, éste puede parecer un Speedmaster Professional, pero no lo es … éste es el hermano vitaminado. Mantiene con su pariente gran parte de su estética: las agujas, el bisel, la caja asimétrica o la disposición e inscripciones del dial nos resultan muy familiares, tanto que en la muñeca incluso tras un primer vistazo nos deleitamos pensando que tenemos todo un Speedmaster Professional. Pero sobre la versión “estándar”, el modelo actual añade algunos aspectos muy interesantes:

– su caja mide 44 milímetros en vez de 42, lo que le da más presencia en la muñeca
– su movimiento es automático y coaxial: bienvenida la precisión y comodidad, ya no es necesario darle cuerda
– su cristal es de zafiro, ofreciendo una mejor visibilidad, incluido el fondo que es visto
– incluye la fecha, de una manera muy discreta posicionada a las 6

En conclusión: el mejor Speedmaster para los que la versión Professional no es suficiente. El reloj se ofrece en un estado excepcional, con toda su dotación. Además, se trata del número 2 de la rara versión “Enamel”, que viene con el dial esmaltado. Sin duda un reloj muy especial … aunque parezca “tan solo” un Speedmaster en la muñeca.